jueves, 22 de julio de 2010

Moleskine: mi diario de bienestar

El otro día me compré mi primer cuaderno Moleskine, un diario de bienestar (Wellness Journal) de la colección Moleskine Passions Journals, que cuenta con seis temas diferentes: cine, música, libros, recetas, vinos y bienestar.

Para quien no conozca esta marca, los cuadernos Moleskine se caracterizan por sus tapas de piel negra (aunque ahora han salido variaciones en colores), sus esquinas redondeadas, su cierre de goma para sujetar las páginas y su bolsillo interior. Un buen compañero de viaje en formato de bolsillo que, como explican en su web, ha guardado bocetos, apuntes, historias y sugerencias de artistas e intelectuales de los dos últimos siglos.

Esta nueva colección de cuadernos Moleskine está dedicada a nuestras pasiones, a esas pequeñas cosas que nos hacen la vida más agradable. Podemos almacenar, archivar, tomar apuntes y personalizar nuestro diario según nuestras necesidades y sentimientos.

El Wellness Journal que me he comprado yo sirve para llevar un seguimiento de tu cuerpo y tu bienestar. Está basado en seis plantillas: metas personales, registro de ejercicios, dieta, salud general, juegos e inspiraciones. Además, incluye una tabla de calorías, un calendario con las frutas y verduras de temporada y secciones en blanco con etiquetas adhesivas para personalizar el contenido.

Estoy deseando empezar a rellenarlo con dietas de comida sana (para ver si consigo al fin tomar 5 piezas de fruta y verdura al día), tablas de ejercicio específicas, técnicas de relajación, tratamientos de belleza y otras muchas cosas... con el fin de llevar una vida más sana y tener un seguimiento escrito de mi estado físico en general. El súmmum para una neurótica hipocondríaca como yo.

Estos diarios se pueden comprar en El Corte Inglés y cuestan unos 20 euros. Aquí os dejo un vídeo demostrativo de 30 segundos del Wellness Journal.

 
El próximo diario Moleskine que me compre será el de recetas, que además lleva cubre páginas para que no se manchen...

martes, 13 de julio de 2010

Cupcakes de limón y merengue


Hoy os voy a enseñar cómo he hecho estos deliciosos cupcakes de limón y merengue, que están inspirados en el clásico British Lemon Meringue Pie, muy popular también en EE.UU. Si seguís la serie "Mujeres Desesperadas", seguro que habéis visto a Bree Van De Kamp hacer una de estas ricas tartas.

La receta la he sacado del libro que véis a la derecha, escrito por Susannah Blake; un pequeño libro con una gran variedad de sencillas y apetitosas recetas de cupcakes.

Este libro fue un regalo de cumpleaños de la Chica Jávea, que no vive en Jávea sino en UK, y de allí me trajo esta dulce sorpresa. Me hizo muchísima ilusión, porque en España es díficil encontrar este tipo de libros tan concretos.

Así que esta receta va por ella y por todos los buenos ratos que hemos pasado desde el parvulario. 

¡¡Vuelve pronto, guapa!! 

Para la masa de las magdalenas he utilizado mi receta de siempre, porque consigue unas magdalenas tiernas, esponjosas y con un sabor que me encanta (será por el ron...). Además, como llevan ralladura de limón, son perfectas para estos cupcakes.

Una vez preparada la mezcla de las magdalenas, se llenan los moldes de papel hasta la mitad. Después, con la ayuda de una cuchara, se hacen huecos en el centro de la masa en forma de volcán, para poder poner el relleno.

Para el relleno, tal y como dice el libro de recetas, utilicé lemon curd, una crema de limón inglesa de la que ya hablamos en el post sobre "Tomar el té en Londres". Es una crema muy suave, con un ligero toque ácido, que le da a los cupcakes un frescor perfecto para el verano.

Yo compré el lemon curd en el supermercado de El Corte Inglés y es este bote que veis a la derecha.

Se coloca una cucharadita de lemon curd dentro de cada magdalena, tal y como muestra la foto de arriba. Luego añadimos un poco más de masa para cubrir el relleno y ya están listas para hornear.

Se hornean a 180º durante 20 minutos y cuando estén cocidas (comprobamos pinchando las magdalenas y viendo si el palillo sale limpio) y doradas se sacan del horno y se dejan enfriar.

Para preparar el merengue necesitamos 3 claras de huevo, un chorrito de zumo de limón y 150 gr. de azúcar. Yo esta vez utilicé azúcar glas, pero se puede hacer con azúcar normal. Con una batidora eléctrica se montan las claras con el azúcar y se añade el zumo de limón. Una vez montado el merengue, se mete en una manga pastelera y se decoran los cupcakes.

Si queremos, podemos gratinarlos un poco en el horno o utilizar un soplete de cocina para darles un toque tostado, o servirlos así directamente.

Así es como quedan por dentro: cremosos y esponjosos. Son muy fáciles de hacer y se tarda apenas una hora en tenerlos listos. Un postre ideal para estos días de verano. ¡Que lo disfrutéis!

domingo, 11 de julio de 2010

Tu vou' fa l'americano - Renato Carosone

Últimamente podemos oir en todas las discotecas la última versión del clásico de Renato Carosone, "Tu vou fa l'americano", que lleva por nombre algo así como "We no speak americano" y es un simple remix de Yolanda be cool & Dcup que, más que versionar, destroza la original.

Como resulta que ésta es una de mis canciones favoritas, he querido mostraros lo que sí es una buena versión de esta canción italiana, más rápida y animada que la original, pero que sí respeta la letra y el ritmo del clásico de Carosone. Se trata de una versión incluida en la banda sonora de la película "El talento de Mr. Ripley", del ya fallecido Anthony Minghella, y que está interpretada por Matt Damon, Jude Law, Fiorello y The Guy Barker International Quintet. Muy divertida.

lunes, 5 de julio de 2010

Palmeritas de hojaldre con chocolate

Las palmeritas de hojaldre son un dulce muy fácil y rápido de hacer. Sólo precisan dos ingredientes:
  •  Una lámina de masa de hojaldre
  • Azúcar
En internet hay multitud de recetas para prepararlas, como este instructivo vídeo de Isasaweis donde se aprecia a la perfección el método de doblado de la masa con el azúcar.


Después se corta la masa en rodajas finas. Yo he hecho los cortes un poco más finos que los del vídeo para que me salieran unas palmeritas más pequeñas, con más forma de corazón que las palmeritas convencionales.

Se colocan en un papel vegetal sobre la bandeja del horno y se cocinan a 200º durante 10 minutos. Pasado este tiempo, se les da la vuelta a las palmeritas y se hornean 2 minutos más para que se doren por los dos lados.


Luego se sacan del horno y se dejan enfríar. Mientras tanto, derretimos al baño María 100 gr. de chocolate de cobertura para cubrirlas, puede ser por una cara o por la mitad, como más nos guste.



Después de cubrir las palmeras con el chocolate, las metemos en la nevera para que éste se endurezca bien o lo dejamos enfriar a temperatura ambiente. En un rato ya tendremos el chocolate en su punto y las palmeritas seguirán igual de crujientes y listas para comer. ¡Qué las disfrutéis!