Los batidos hechos con helado son una de mis bebidas favoritas, ¡me chiflan! Es algo que tomo de vez en cuando en casa como postre o para merendar; por eso, el Chico Pecoso ya se ha convertido en todo un experto preparándolos. Estos deliciosos batidos bicolor de vainilla y fresa que os traigo hoy los preparamos para la fiesta de cumpleaños de Miranda, pero con las prisas los colores no quedaron bien separados. Así que a continuación os enseño el sencillo paso a paso para que os queden perfectos.
La idea de estos batidos la sacamos del libro de Amy Atlas, Sweet Designs, pero hemos hecho alguna pequeña modificación en la receta.
Ingredientes: (para 4 batidos)
- 500 ml. de helado de vainilla
- 500 ml. de helado de fresa
- 300 ml. de leche (aproximadamente)
Para decorar:
- 200 ml. de nata para montar
- 4 cucharadas de azúcar
- Sprinkles o fideos de colores
- Guindas o cerezas
Batimos el helado de vainilla con unos 150 ml. de leche. En lugar de echar toda la leche de golpe, lo mejor es ir añadiéndola poco a poco hasta conseguir la consistencia deseada. Llenamos los vasos de batido a la mitad y los metemos en el congelador durante media hora aproximadamente.
A mí no me gustan los batidos totalmente líquidos, sino más bien densos. Además, en este caso os quedarán mejor divididos los sabores y colores si los hacéis con un poco más de cuerpo. Luego, al servir los batidos, el helado se irá derritiendo y se podrá beber fácilmente con una pajita, así que no os preocupéis si veis que tienen mucha consistencia.
Después batimos el helado de fresa con el resto de la leche, igual que hemos hecho con el anterior, y llenamos la otra mitad de los vasos. Los guardamos en el congelador mientras montamos la nata para decorarlos.
Montamos la nata con el azúcar y, con la ayuda de una manga pastelera, decoramos nuestros batidos.
Añadimos también unos cuantos sprinkles de colores.
Y una guinda o cereza para acabar de decorarlos. Yo suelo usar guindas en almíbar y les añado rabitos de cereza para que queden más bonitas.
Colocamos una pajita en cada vaso y ya estarán listos para degustar.
Es un batido sencillísimo de hacer y muy rico. En España me cuesta encontrar sitios donde tomar un buen batido de helado, porque tienen la manía de echarles azúcar (lo que le da un sabor artificial que no me gusta nada) y mucha leche. Si queréis tomar un buen batido al estilo americano como los que sirven por ejemplo en VIPS o Tommy Mel's os recomiendo que la cantidad de leche nunca sea más del 50% de la cantidad de helado. Y si al probarlo veis que os ha quedado con poco sabor porque os habéis pasado con la leche, nunca le añadáis azúcar, echad más helado. ¡Probadlos y me contáis!
¡Feliz domingo!